domingo, 16 de mayo de 2010

Ansias camino a casa

era familiar, no tengo ninguna duda...
el trayecto al planeta habia cayado todo pensamiento, aun asi debi notar antes las cosas, ese tiempo en el planeta fuera de curso solo permitia pensar en una cosa, y eso era el planeta en si, y ahora que me alejo camino a casa todo se aclara de golpe...
el tío Jhett, no dejaba de contarnos historias sobre la tierra... nos regalaba olotarjetas con "mapas" y textos ilegibles que eran de la tierra(almenos el así lo creía) el era realmente excentrico, no era clérigo universal ni parte de los rastreadores del origen, aun así su gusto por la "cultura" que dejamos atrás, esa historia en común que el soñaba alguna vez unió a todos, aun así no tuvo mucha suerte con contagiarle el gusto por la mitología y las leyendas a la familia, me engañaría a mi mismo al decir que su deseo murió con el...
disfrutaba mucho cuando niño de todos sus relatos... fue una grandiosa infancia los mejores 20 años de mi vida, con el tiempo(y las hormonas) me interese en otras cosas, además nunca fui muy atento a los detalles por lo que a tan solo 60 años de edad ya había olvidado de que iba todo lo que el decía, solo me quedaban los recuerdos de momentos entretenidos y hasta cierto punto mágicos, revisando un mundo que había sido olvidado en este universo tan chico, este lugar que es rutinario, parecía volverse mejor con tan solo pensar en algo tan insignificante como un planeta olvidado...
desde que tengo mi propio asteroide no había pensado en el tío Jhett, claro hasta el día en que fuimos asignados a la misión de rastrear y analizar el planeta fuera de órbita...
mi cumpleaños 80 como olvidarlo, ese día me esperaba encontrarme con 2 envíos, la nueva misión y una pieza de metal con una carta del tío Jhett, diciendo que era una llave y que mi hermano mayor y mis 3 primos tenian una también, el motivo de este regalo es el siguiente, me voy del sistema solar, ya estoy envejeciendo el peso de los 500 años comensara a mermar mi memoria y mis fuerzas antes de que lo pueda notar, y no moriré sin buscar antes la morada de eden...
Eso era todo, la carta no decía mas, solo puedo suponer que las demás cartas pueden tener algo mas... pero no había tiempo de contactar a la familia, tenia que salir a la estación de control y análisis del macrohabitat para cumplir con el trabajo(no me puedo quejar buena paga, poco que hacer y poco tiempo de trabajo eventualmente se presentan jornadas de un año, pero no es nada, es un trabajo ligero y cómodo) asi que desde que partí a la estación de control no podía dejar de pensar en las historias del tío Jhett.

Después de ver esa cosa, tengo que revisar los regalos que concervo, y buscar las otras llaves, a este punto es mas que curiosidad parece cosa de familia.

4 comentarios:

Jardinero del Kaos dijo...

Lindo universo el que estas construyendo!!!
Estan los capitulos cada vez mas solidos, y Sci-Fi.

muy bien camarada

Anónimo dijo...

Hola, ni idea si ya me conoces, pero mientras voy a hablar yo, puesto que G está en otro lado.

Esta historia me recordó bastante el ambiente en el cual yo estaba antes. Vagos o inexistentes recuerdos del planeta de los humanos, viviendo en el espacio, relatos increíbles, etc.

Ya quisiera un tío que me regalara algo jaja.

Por cierto, no suelo ser crítico ni nada (Mi propio intento de novela fue desastroso, necesito que alguien escriba mi biografía), pero ayudaría bastante a la lectura si se separara en párrafos. En parte porque soy vago, y el resto por estética. Hope that helps, buddy.

Anónimo dijo...

Lo siento por el tío anterior, es mi responsabilidad, jeje. Estos días estoy más cagada que de costumbre.

¡Me parece genial el escrito! Espero que continúes estos relatos de ciencia ficción, es un género que disfruto. Además, me agrada verte más activo.

Un gran abrazo, :3

Kurogane dijo...

bueno ps aqui pasando a revisar, quedo chido

 
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